domingo, febrero 11, 2007

Reflexionando...reloaded

...y entonces algo en su cabeza hizo "click", se dió cuenta de algunas cosas de las que antes no se había dado cuenta y desde ese momento decidió no volver a ser vulnerable nunca más...

4 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Supongo que por timidez, yo nunca me he relacionado con nadie en los gimnasios. Voy, hago mi clase, me ducho y desaparezco. Nunca hablo con nadie. Como con la apertura del O2 se han ido casi todas las pijas revenidas que iban al mío, da mas palo estar en el vestuario, sólo con una o dos personas, y no hablar con ellas. Esta semana, decidí cambiar eso. Estaba vistiéndome y había dos mujeres más. Una estaba diciendo que necesitaba comprarse una camiseta negra, de tirantes, que estuviera chula. Yo le digo: -En Blanco hay camisetas que están bien.- Ella cierra los ojos, respira hondo y como si le doliera hablar me dice: -He dicho que la quiero NEGRA-
Yo: -Bueno, es que Blanco es el nombre de la tienda.
Ella: - ¿ah si? ¿Dónde está?
Yo (muy servicial, con una sonrisa): - en el Aljub, cuando subes por la rampa te la encuentras.
Ella (con una cara de susto/asco): - Ah, es que yo nunca voy al Aljub y JAMÁS me compro ropa en los centros comerciales (esto último casi escupiendo espuma por la boca)

...y entonces algo en su cabeza hizo "click", se dio cuenta de algunas cosas de las que antes no se había dado cuenta y desde ese momento decidió no volver a ser vulnerable nunca más...

14 feb 2007, 10:31:00  
Anonymous Anónimo said...

A veces reconozco que por bisoñez tiendo a pensar que no soy del todo competente en mi trabajo, que me falta un hervor, ya que se trata de mi primera experiencia laboral seria. No hace mucho, gestioné el envío de un contenedor repleto de material donado a un país africano.
Una máxima dirigente de mi empresa decidió, al final del proceso, preocuparse por su marcha.
Enviado ya el contenedor, se cuestionó un soleado día cómo era posible que un barco avanzase irremisiblemente hacia un país africano cualquiera.
Delante mía le preguntó a alguien ubicado por encima mía en la pirámide laboral (que no en la escala evolutiva):
- "¿Pero tú has firmado los documentos que permitieron que el barco saliese?"
- "¡No!". Le espetó temblorosa.
Dirigió su mirada hacia mí:
-"¿Los has firmado tú?
-"No", espeté confiado yo.
Una ira indescriptible se adueñó de la líder local, dando paso a una retahila interminable de calificaciones personales dirigidas hacia mí poco decorosas e impropias de una dama de su posición.
Cabizbajo, salí de la reunión con la moral partida. Al llegar a mi puesto de trabajo, llamé a aquella santa a la que sustituyo (santa para lo que tiene que soportar) y le pregunté:
- "Nuestra líder está desencajada, y puede que con razón. ¿Cómo es posible que el barco esté a punto de llegar a su destino si nadie ha firmado los documentos?".
Ella respondió:
- "Claro que están firmados. LOS FIRMÓ ELLA HACE DOS MESES, DELANTE MÍA, ANTES DE QUE TÚ LLEGARAS."

...y entonces algo en su cabeza hizo "click", se dio cuenta de algunas cosas de las que antes no se había dado cuenta y desde ese momento decidió no volver a ser vulnerable nunca más...

14 feb 2007, 10:58:00  
Blogger Jose Luis said...

Laura Ro --> la lástima es que aún no te hayas dado cuenta de una vez de que hay mucha gente que no está a tu altura. Para muestra estas dos

Tom tom --> dos cosas:

minar.(De mina2).

1. tr. Abrir caminos o galerías por debajo de tierra.
2. tr. Hacer grandes diligencias para conseguir algo.
3. tr. Consumir, destruir poco a poco.

Y

incapacidad.
(Del lat. incapacĭtas, -ātis).

1. f. Falta de capacidad para hacer, recibir o aprender algo.
2. f. Falta de entendimiento o inteligencia.
3. f. Falta de preparación, o de medios para realizar un acto.
4. f. Estado transitorio o permanente de una persona que, por accidente o enfermedad, queda mermada en su capacidad laboral.
5. f. Der. Carencia de aptitud legal para ejecutar válidamente determinados actos, o para ejercer determinados cargos públicos.

Ahora mezclas las dos, y descubres que definen perfectamente a nuestras queridísimas...

15 feb 2007, 1:54:00  
Anonymous Anónimo said...

LLego a comentar este post un poco tarde, pero ahí va mi aportación:

Como sabéis los que me conocéis trabajo en Cataluña como profesora de castellano en un IES público de la comarca del Garraf. Desde el primer día me advirtieron tanto profesores como toda clase de gente que conocen la zona que ese centro era bastante conflictivo, alumnos de familias desestructuradas y con bastantes problemas de fondo y forma. Varios meses después puedo afirmar que es cierto, completamente. Aún así, me encanta estar con ellos. Será masoquismo, será que me siento valorada por ellos porque me dan lo que muchos compañeros míos ni tan sólo se han molestado en ofrecerme.
Hace unos meses, llegó un profesor nuevo al centro y, como muchos de nosotros, era valenciano. La realidad es esta, tenemos que marcharnos para poder trabajar, no por capricho. Un profesor (compañero) hizo el siguiente comentario:
-"¿Otro valenciano?, ¿qué pasa?, ¿que los valencianos sois mano de obra barata?"

...y entonces algo en su cabeza hizo "click", se dio cuenta de algunas cosas de las que antes no se había dado cuenta y desde ese momento decidió no volver a ser vulnerable nunca más...

1 mar 2007, 18:25:00  

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